Dicen que soy la escritora que nunca supe.
Una tejedora de palabras invariables
de la que muchos esperan más que un verso
soy ese libro que no sale
la surrealista, entrañable,
la temporalmente lejana
la biblioteca inconclusa de mí misma
la escritora de las pieles de gallina
la que leen en el bus de 7:00 a.m.
soy un pedazo de canción
un sinfín de recuerdos apuñados
y nueve años de buena suerte
un ojo que quita el aliento
un poema que llena de preguntas
y revive no sé cuánto atardecer
una estructura, un reclamo
a la que no engaña un anónimo encubierto
un de repente, un alma sin peso,
soy alguien sin comentarios,
soy magistral…
Y yo que apenas
elegí nacer un día.