lunes, 24 de junio de 2013

Humano


Si se me olvida la humanidad
en cada sendero de la vida
llénenme de sal el cuerpo
de musgo y jabalinas los ojos
porque nunca ha sido este tiempo
más que para eternizar la espera
para reconstruir las paredes y los techos
de aquellos que se comen al aire
y siguen sonriendo en silencio.
Nunca se podrá escapar de mí
esa incansable sensación de poseer
el mundo entero y sus ropajes
las calles y cada nombre
el vapor de un hermano que respira
porque para eso vine
para eso me despierto todos los días
y descobijo la realidad
que quién sabe por qué

no me toca vivir. 

miércoles, 19 de junio de 2013

Ambigüedad (microcuento)

Ángel caído
Erika Kunh















Ella no entendió por qué tuvo que morirse un día.

domingo, 2 de junio de 2013

Resaca

No tengo espacio
para contrariar a la muerte
en cada esquina de las calles.
Tantos hombres vencidos
solo recuestan su talento
en un viejo hotel de paso
pero nada más.
Aman unas horas
esa oscuridad en su elocuencia
y terminan por amanecer igual:
con la resaca de quien no ha aprendido
a beberse la vida.


domingo, 12 de mayo de 2013

Ping-pong


Ir de un lado
retener la virtud de la palabra
en una esquina cerrada.


Ir del otro
y contemplar el vacío
de cada espacio incoloro.


Ir de un lado.
Ir del otro.

Retenernos
contemplarnos
sin encontrar

nos 

un centro. 

jueves, 9 de mayo de 2013

Rutina


Abrir los ojos
para despeinarse del mundo
alzar las manos
mientras vos andás afuera
darme una ducha
con el agua de los ojos
secarme el cuerpo
lleno de palabras adormecidas
vestirme con mi nombre
uno que casi no se pronuncia
y seguir en la rutina del día
como quien no tiene agenda
como quien busca al tiempo.


viernes, 3 de mayo de 2013

Que somos


Me gusta decir
que somos como montículos
de tierra y hojas
que tenemos una isla
de recuerdos
y que hace siete meses
no sabemos 
nada del mundo.

Cuando se hace tarde
creo que nos convertimos 
en cazadores y espejos
nos escondemos
con vista hacia el ahora.

Me gusta decir
que somos aliados
rescatándonos los huesos
cada uno a su manera
que callamos impalpables
ante los gritos, las ausencias.

Y si somos abono
me gusta decir
que dejamos campos rellenos
de cera y lino
riego cristaloso
que se olvida de los causes.

Me gusta decir
que somos como cobijas
cosidas y esparcidas
que buscamos túneles
con lianas escaleras.

Me gusta decirnos
que mañana habrá luna 
que mañana no habrá enojo
que mañana será ya casi
que mañana está escondido
en lo que me gusta decir 
que somos que somos.

martes, 16 de abril de 2013

basta no decir nada


Solo basta decir que sí
no ahondar en la correspondencia
de ese silencio tuyo
listo para secar la senda del adiós
con un par de sábanas
y varias notas en el anonimato.
Es justo pasearse por el parque
deslumbrar a otros con los versos de ayer
sin la necesidad de colorear tus puntos blancos
dejar los zapatos al lado de los pies
para simular el descanso
y sombrear el piso
mientras no avanzamos en nada.
Estrictamente necesario
es vaciar el nombre en las puertas
aparecer con eso que te hace único
                                               en apariencia
y dejar de sofocar la oscuridad
con esas ideas tan antiguas
que se salen por tu ojo derecho,
por tu palabra hueca.