lunes, 31 de octubre de 2011

gente que camina



Vos te sentás
frente a la gente que camina
te invertís
y solo tenés certeza
de la longitud de las aceras.

Cuestionás si los pasos
se miden igual
en todos los pies
o si algunos dejan su realidad
para volar a 10 cm del suelo.

Uno ve pasar la prisa
la critica desde lejos
mientras algunos se entumecen
sentados, casi muertos.

Uno se queda aquí
desde este lado del vidrio
acumulando días caminados
inviernos sin sombrilla
justo al mismo tiempo
en que vos y tus señales
pasan rápido y sin aire
al frente de mis manos.

jueves, 20 de octubre de 2011

Estación del paraguas



Solo lloverá algunas tardes
y vos me dirás
que llevábamos tiempo sin sabernos.
No puedo asegurarte
unos pies sin ahogo
junto a una mente soñadora.
Hablaremos del corazón
serviremos café recién chorreado
y solo veremos llover la vida.
Nos sentaremos a ver pasar la gente
cerca, sin herirse ni herirnos,
y así viviremos
sabidos y lloviendo
haciéndonos conscientes
de lo cercano que es un recuerdo.

lunes, 17 de octubre de 2011

Verbo con flores



Te reís y pensás
En un manojo de claveles
para vos, Alejandra,
para vos que sonreís
con niños en los dientes.


Si pudieran regalarte una ilusión
esa sería el mundo jugando
capaz de olvidarse del tiempo
del dinero, del hambre,
lleno de luz y corazones.


Te reís y soñás
con aquello que los hombres
han dejado de lado
con tu idea de ser libre
en la alegría, los gritos…
en las calles llenas de paz.


Nadie te ve venir
podrían ocultarte en silencio
pero serías capaz de salirte
explotar en un mar de saltos
en un pestañeo de palabras.


Te reís y sos…
Sos vos, Alejandra.

lunes, 10 de octubre de 2011

Carrusel



Me escondieron
los caballitos del carrusel.
Tuve que irme dando vueltas
a pie y sin zapatos
por el parque despoblado.
Alguien me gritó
que se cansaron
de girar
                                   girar
                                   mareados
y se fueron a comer zacate y luz
a la orilla de un río.

Creo haberlos visto
debajo de una carpa
en un camión de sinrazones
un tanto hambrientos
mientras se preguntaban
dónde quedó su puesto
dónde sus niños
                                   girando
                                   mareados
                                   girando.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Puntuada

A Pablo



He llegado a apreciar
los paréntesis de tu boca
mientras me escurro
guión abajo
por tu cuello.
Casi no te exclamo
las razones de mi espacio
porque estoy cerrada,
punto aparte,
en el vaivén de las manos.
Aunque te deje a la deriva
coma
me asusto suspensiva
al ignorar tu desenlace.
Tengo entonces
una idea que se estremece
en dos puntos:
mi lógica
y tus explicaciones sencillas
de cómo amar.